La composición del artesano José Manuel Tos muestra el paisaje tal como era seis décadas atrás, en la época en que se inauguró el mercado
Un mural de azulejos elaborado por el perito en ceràmica artística José Manuel Tos, formado en la Escuela de Manises, preside desde esta semana la zona de venta de pescado del Mercat Muncipal de Dénia. El mural, compuesto por 829 azulejos pintados al agua sobre esmalte, muestra una panorámica de la Dénia de mediados de los años 50, época en que se fundó el Mercat Municipal, vista desde el mar. En primer plano, las aguas del puerto y sus barcas tradicionales, algo más allá, la fachada marítima, el castillo y, al fondo, el Montgó. Elementos característicos de la ciudad escogidos por el artista para representar el espíritu de Dénia y su tradición marinera. Aparecen también el escudo del ayuntamiento, junto al nombre del Mercat Muncipal, el año de su inauguración y, en la esquina superior derecha, una rosa de los vientos, tan simbólica en la navegación.
Tras cuatro meses de trabajo en su taller de Jesús Pobre, donde reside Tos desde hace unos años, y cuatro días de montaje “complicados”, porque si se rompe una pieza se paraliza toda la colocación hasta que tenga hecha una nueva, el mural ya puede ser admirado por la clientela y los visitantes del mercado.
El proyecto de este mural decorativo es una iniciativa del concejal de Mercados de la anterior legislatura, Javier Scotto, a la que ha dado continuidad hasta hacerla realidad la actual concejala del área, Sandra Gertrudix.
Scotto explica que la idea surge ante la necesidad de alicatar el muro de cerramiento construido en 2018 cuando se llevaron a cabo las obras de acondicionamiento de la zona del pescado del Mercat. En vez de optar por el azulejo blanco clásico de las instalaciones, Javier Scotto quiso apostar por una actuación que aunara la funcionalidad con “la mejora del patrimonio del edificio, de su riqueza cultural y su embellecimiento, además de difundir que el Mercat de Dénia también es un mercado marinero”.
Para el concejal, este mural cerámico, de 6 metros de anchura y 5,60 metros de altura, “es una ventana a la que asomarse para quien quiera contemplar aquello que permanece en la retina de los marineros: el puerto de Denia, su castillo y el omnipresente Montgó, y, sin duda alguna, es una actuación muy singular que hace del Mercat Municipal un espacio para comprar, convivir y disfrutar”.