Morir en Dénia. Necrópolis, maqbaras y cementerios
El área de Arqueología y Museos del Ajuntament de Dénia ha decidido repetir de nuevo dos visitas guiadas “Morir en Dénia. Necrópolis, maqbaras y cementerios” tras la buena acogida que ha esta actividad programada para este fin de semana, para acercar a la ciudadanía y las personas visitantes a los rituales funerarios que nuestros antepasados han construido a lo largo de la historia.
Las nuevas rutas se han programado para el sábado 11 y domingo 12 de noviembre, a las 11 horas, con salida desde la plaza de Valgamedios. Se requiere inscripción previa llamando al 96 642 02 60, en horario de martes a domingo, de 10 a 13 horas.
El séquito iniciará la singladura funeraria con el primer indicio de nuestra ciudad, la sepultura colectiva, datada ahora hace 5.000 años, a una cuevecita del cerro que constituye el centro de nuestra geografía y sobre el que, muchos siglos después, se asentarían íberos, romanos y musulmanes, y donde se fundaría la villa de Dénia: el castillo.
La comitiva se acercará al espacio y al tiempo de las necrópolis romanas, a sus sepulturas y epigrafía funeraria; a las tumbas de la Dénia visigoda y a los cementerios islámicos, maqbaras, donde reposan los restos de poetas, filósofos y quién sabe si Mujahid, el gran rey de la Taifa de Daniya.
Después se detendrá a contemplar, desde la perspectiva que ofrece el tiempo, los cementerios posteriores a la conquista cristiana, el cementerio de la iglesia de la villa y las criptas de las iglesias de la ciudad, para poner una brizna de luz sobre este aspecto que permanece entre tinieblas.
La pompa fúnebre concluirá en el cementerio, cuya fundación remite al año 1843, ahora hace 180 años. Josefa Morand Cardona, representante de una de las familias de más eco social, dejó en testamento 4.000 pesetas para crear un recinto funerario adecuado donde ser enterrada la próspera y burguesa Dénia de la segunda mitad del siglo XIX. Desde entonces, hombres y mujeres ilustres, mecenas, políticos y comerciantes reposan en suntuosos panteones, donde la iconografía refleja ideologías o profesiones y otros aspectos interesantes de la vida de aquellas personas que marcaron toda una época.
Un paseo por los espacios ajardinados del cementerio permitirá aproximarnos a acontecimientos luctuosos como la epidemia de gripe española de 1918, los fusilados de la Guerra del 36 y la represión que sucedió, o aquellos relacionados con el nacionalsocialismo. Pero también, poner nombre a personajes de nuestra más estimada intrahistoria como Carmen Martí Palop, primera mujer concejala del ayuntamiento de Dénia en 1925; Mercedes Colveé, escultora; o el historiador Chabàs; el pintor Domingo Llorens o el tenor Cortis, artistas, maestros o industriales, cuya vida, y muerte, constituye una singular fuente de información para conocer de primera mano nuestra historia contemporánea.