Hoy, 5 de mayo, es el Día de Homenaje a los españoles deportados y fallecidos en Mauthausen y en otros campos y a todas las víctimas del nazismo de España. En el cementerio municipal de Dénia ha tenido lugar un acto de homenaje a los dianenses víctimas del nazismo en Mauthausen promovido por la Xarxa Memòria (Municipios para la puesta en valor de la memoria histórica) de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP) y la Delegación de la Amical de la Comunidad Valenciana y apoyado por el Ajuntament de Dénia. El acto se enmarca en la programación de las jornadas de memoria histórica “Memoria y futuro” que se celebran en la ciudad durante abril y mayo.
La primera teniente de alcalde, Maria Josep Ripoll, ha recordado que Asensio Vives Roselló, Jaime Crespo Vengut, José Ramis Grimalt y Vicente Pérez Bolufer, hijos de Dénia, lucharon en la Guerra Civil española movilizados por el gobierno legítimo de la República. El final de la guerra y la previsible represión los llevó al exilio en Francia. Después de la dura experiencia en los campos franceses, todavía les esperaba el peor final: los campos de exterminio nazis de Mauthausen y Gusen. Allí murieron asesinados Asensio Vives, Jaime Crespo i José Ramis. Solo sobrevivió Vicente Pérez, que moriría 11 años después, exiliado todavía en Francia, en un accidente.
En representación de los familiares de los dianenses víctimas del nazismo en Mauthausen ha hablado Josep Ahuir, quien ha agradecido a las asociaciones y al ayuntamiento “que mantengan viva la llama de su memoria” y sea posible que “por fin, se les haya hecho un poco de justicia, porque durante muchos años hemos tenido al verdugo viviendo aquí y a las víctimas exiliadas”.
En el campo de concentración de Mauthausen, y en el subcampo de Gusen estuvieron internados cerca de 8.000 republicanos españoles que se vieron obligados a abandonar nuestro país al final de la Guerra de España. Fueron desproveídos de su nacionalidad por decisión del gobierno franquista y por tanto declarados apátridas; fueron ignorados por el gobierno francés del mariscal Petain; sufrieron innumerables atrocidades y cerca de 5.300 fueron asesinados allí y en otros campos de concentración nazis. Según los últimos datos verificados por la Amical, fueron un total de 656 deportados (entre ellos 10 mujeres) procedentes de 234 municipios valencianos, los que llegaron a los campos de concentración y exterminio nazis. De los 656 deportados y deportadas, 411 fueron asesinados, 5 desaparecidos, 1 escapado y 239 fueron finalmente liberados. Solo 5 de las deportadas consiguieron sobrevivir.